Sofía cumplió cuatro años en diciembre y esta es la tarta que le hice, quería a la sirenita y así quedó la versión que hice del personaje.

 

 

Para la cola de la sirenita usé la esteca para marcar sonrisas, con ella hice las escamas y después con un pincel grueso le apliqué color en polvo dorado de esta forma se consiguen los reflejos que podéis ver. La roca sobre la que está sentada no es comestible, es de poliespán, corcho blanco.

La tarta estaba compuesta por dos bizcochos y medio, el primer piso hecho con bizcocho y medio de 18 cm de diámetro y el superior de 10 cm de diámetro, todos de chocolate bañados con almíbar de choco y relleno de Nutella, nunca falla con los niños.

 

 

El coral eran laminas de fondant con CMC cortadas rectangularmente, con las boquillas de la manga pastelera hice los agujeros y lo puse a secar sobre varias estecas creando de esta forma las ondas. Los dorados de la tarta los hice con pintura en polvo dorada, como la que usé en la cola de la sirenita, pero esta vez disuelta en un poco de anís, también podéis usar cualquier otra bebida blanca con alcohol y ¡a pintar con un pincelito!. Para hacer las conchas creé mi propio molde con fondant y CMC y una concha de verdad, la marqué en el fondant y la dejé secar 24 horas, al día siguiente el molde estaba seco, sólo tuve que añadir azúcar glass y rellenarlo de fondant ¡listo! ya tengo la concha que quería. De esto tengo que hacer un tutorial pero con vídeo para que veáis lo fácil que es.