Os presento a Obscurio, un Gormiti. Yo no lo conocía, a mi hijo Kike no le gustan mucho los Gormitis por lo que no estoy muy puesta en el tema pero por lo que he podido ver entre los niños de cinco años causa furor. ¡Qué feo que es! y para colmo es un villano con mucho carisma, jejeje. Pues cuando vi la pinta que tenía el bicho, me dije a mi misma... esto va a ser difícil, no sabía por donde pillarlo, en un principio pensé hacer una tarta de dos pisos con el logo de Gormiti y moldelar el personaje con pasta de goma, pero no tenía sentido hacerlo, cuando la mamá de Andrés me dejó uno de los muñecos de Obscurio como muestra para la tarta, reproducir el mismo muñeco en azúcar... esa idea no me gustaba nada, sobretodo porque no me podía quedar mejor que el original ¿no? para que hacer algo que ya estaba hecho, por lo que me decanté por la técnica puzzle y reproducir el personaje sobre superficie plana, el problema principal era la cara, en el muñeco que me dejaron no estaba muy definida y las imágenes en internet no son muy buenas, finalmente y después de buscar y buscar encontré un dibujo que más o menos podría servir y empecé a hacer las plantillas en papel para empezar a trabajar, decidí hacer el bizcocho redondo y que los pies y parte de las alas sobresaliesen del bizcocho, hubiera sido más sencillo hacer un bizcocho rectangular, todo bien apolladito y fijo pero claro, yo siempre pensando en el más difícil... y decidí hacer la figura en pasta de goma pensando que tendría la suficiente dureza, porque el pastillaje filipino es tan duro... y me equivoqué, no tuve en cuenta el calor y la humedad que está haciendo provocando que las piezas no se sequen y que el fondant esté blando y difícil de modelar... por lo que a pesar de que la base de la figura estuvo tres días secando no había forma de que endureciera... finalmente la imagen de Obscurio estaba blanda y por lo tanto las alas y piernas que sobresalían caían por su propio peso ¡qué mustio estaba el pobre! con lo cachas que es él!, finalmente tuve que reforzar los bordes con palillos, no se veían, pero no me gusta nada hacerlo y más para tartas infantiles, bueno... como iba a estar en la fiesta estaría pendiente en el momento del corte para quitarlos todos... la próxima vez pastillaje y si no lo quiero usar bizcocho que abarque todo el dibujo o hacerlo en invierno cuando el fondant está mucho más duro. Con cada tarta aprendo nuevas cosas...
Bizcocho de vainilla relleno de nocilla y bañado en almíbar también de vainilla, está teniendo mucho éxito esta combinación, y está mal que lo diga yo pero estaba muy rica ;) la pasta laminada que cubría el bizcocho con aroma de limón. Lo mejor, la cara de Andrés cuando vio la tarta, se quedó con la boca abierta y no es una frase hecha, literal CON LA BOCA ABIERTA. Hasta pronto!